Ficha Técnica:
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►Autor: Lana C.S. ►Editorial: Autopublicado ►Género: Drama | Juvenil ►Saga: El orfanato #2 ►Nº de páginas: 186 ►Traductor: -- |
—¿Cuándo usarás la palabra "amor" al final de una frase? —preguntó con la mirada fija en mis manos.
Yo jugaba con el fluorescente cojín de mi cama.
—La he usado muchas veces —le dije en mi defensa. —Ayer la usé. Te dije: Claire me dejó usar jeans en la cena el domingo... ella es un amor".
Liam giró los ojos.
—No importa.
—¿No? —me tensé.
—No. Sé que me amas. Puedes seguir aplazando las palabras. Yo seguiré oyendo tu silencio. Él nunca miente. —Descontroló mi corazón.
—No pongas palabras en mis labios que no he dicho —solté con nerviosismo.
—De acuerdo, pondré algo mucho mejor que eso.
Y me besó.
Yo jugaba con el fluorescente cojín de mi cama.
—La he usado muchas veces —le dije en mi defensa. —Ayer la usé. Te dije: Claire me dejó usar jeans en la cena el domingo... ella es un amor".
Liam giró los ojos.
—No importa.
—¿No? —me tensé.
—No. Sé que me amas. Puedes seguir aplazando las palabras. Yo seguiré oyendo tu silencio. Él nunca miente. —Descontroló mi corazón.
—No pongas palabras en mis labios que no he dicho —solté con nerviosismo.
—De acuerdo, pondré algo mucho mejor que eso.
Y me besó.
Bueno.. ¿Qué decir de la continuación de la hermosa historia de Rebecca Gordon en El Orfanato? A decir verdad apenas estoy conociendo a esta autora y tengo que decir que me encanta. Su manera de describir a los personajes, los diálogos, los pensamientos... esa forma de conocerlos desde el primer momento y hasta hacernos sentir identificados con ellos en algún momento. Es sin duda una buena referencia a tomar en cuenta de que escritores auto publicados pueden llegar a ser tan buenos como aquellos que tanto conocemos por la tanta publicidad que les dan las editoriales.
En este libro conocemos más acerca de la protagonista. Si bien en el primer libro de esta bilogía la vemos bastante madura para su edad por la vida que ha llevado, poco a poco entre las líneas de "La vida después de mi" la veremos crecer y madurar todavía más en las diversas situaciones que se le presentan.
Otro aspecto a destacar de esta lectura y que me gustó mucho es que, si bien en El Orfanato, esta autora ya tocó temas como la auto mutilación, ahora nos presenta algunos otros como el suicidio, el embarazo adolescente, la pérdida de seres queridos... Temas que tenemos cerca, porque en algún momento hemos conocido a alguien cercano o más o menos cercano con alguno de estos problemas.
Desgraciadamente debo decir que en esta parte, la autora quizá se pasó un poquito con los tópicos, por lo que quizás, por estos pequeños detalles, el primer libro me gustó un poco más.
Liam Young había explotado. Pero junto a su explosión yo entré en posesión. Algo caliente y maligno se apoderó de mi, de mis ojos, de mi boca y de mi puño. Y de alguna manera ese demonio fue a parar a la nariz de Liam. La cual se encontraba goteando sangre y manchando el pulido piso de granito de St. Vladimir.
Sabemos que nuestra protagonista viene de una vida bastante dura, pues que te abandonen tus padres de pequeña no tiene que ser nada fácil de superar y algunas secuelas tiene que dejarte, pero esta escena me sorprendió bastante teniendo en cuenta la evolución de personalidad que ya llevaba Becca.
Supongo que los ángeles caídos tienden a confundir cualquier raciocinio humano. Son buenos y malos. No puedes darte cuenta de la delgada línea que separa esta realidad, cuando ya estás dentro del infierno o del cielo. Brandon Slayter es un ángel. Un hermoso ángel caído.
El típico tópico de "triángulo amoroso". En el primer libro me gustó, pero al igual que dije antes, creí que ese tema había sido aclarado ya. Pues no. El chico sigue con su "enamoramiento" sin darse cuenta ninguno de ellos, de lo que está a su alrededor.
Lo bueno si es breve, es dos veces bueno.
Claro que página a página, la autora nos lleva a situaciones con nuestra protagonista para que esta entienda donde estaba equivocada, con fábulas, actos de otros personajes e incluso recuerdos pasados que en algún momento le llegan a la mente en el presente donde se da cuenta con pequeños detalles que el destino es una parte importante en la vida.
El ave plata representaba las cosas más valiosas y hermosas: siempre esperaba recibir los mismos halagos. Cualquiera pagaría una suma altísima tan sólo por mirarla —suspiró de nuevo—. El ave gris siempre lo admiraba a la distancia. Quería ser como él: a pesar de que ambas permanecían en la misma jaula y eran observadas por el mismo público. Nadie se detiene a ver las cosas tan simples. ¿Quién quiere tener un ave gris cuando un ave plata está girando alrededor?, eso era precisamente lo que el ave gris pensaba todo el tiempo. Hasta que un día un espectador diferente quedó maravillado con el ave gris. Pero éste a causa de los constantes rechazos se había vuelto arisco y prejuicioso. Atacó al espectador. Y así concurrían los días de ambas aves. Siempre juzgadas por su apariencia. Triste, ¿no crees?
Con esta fábula, la lección le llega a nuestra protagonista de la mano de la sirvienta de la familia Slayter, Lulu, para explicar algo tan simple como el comportamiento de la hermanastra de Becca hacía ella. Y es que, antes de juzgar a alguien por como se comporta con nosotros mismos, deberíamos pararnos a pensar en el por qué de esa actitud contra nuestra persona y si nosotros también tenemos algo que ver con ello y podemos hacer algo para solucionarlo.
También en esta novela la autora nos enseña como a veces el destino juega con nosotros de la manera en que menos lo esperamos así como lo juega en la vida de nuestra protagonista.
Desde que tenía siete años nos conocimos y jamás imaginé que aquel niño de ojos hermosos y aspecto despreocupado, se trataba del mismo Liam Young; el mismo que me sonreía desde el rompe olas cada vez que nuestras miradas se encontraban.
—Diferente como intrigado, diferente como embrujado... "Esa bruja sigue mirándome, ¿acaso le gusto?". Pensé. —Liam confesaba con una media sonrisa. Secaba mis lágrimas y continuaba. —Después te vi aquel día en las carreras; al principio no te reconocí, aunque me parecías algo familiar —él confirmó con otra sonrisa y un beso en mi frente. —Pero luego de que me mostraste de dónde venías, lo supe. Eras la chica de la plaza que no dejaba de mirarme y que no había logrado salir de mi mente por más que lo intentara. Si me hubieras preguntado meses atrás si creía en el destino, de inmediato te hubiera dicho que no, "A la mierda el destino". Pero ahora que estamos juntos, puedo comenzar a creer... puedo sostener una bandera en medio de una tempestad, porque sé que estaré seguro contigo. Puedo construir mi mundo poco a poco.
No solo el destino juega un papel interesante en esta historia. Si ya en El Orfanato Lana C.S. nos presentó la relación de amistad más allá del amor entre la protagonista Rebecca Gordon y Leon Oxford, acá el vínculo se hace más fuerte, hasta el punto de que ambos entienden que es el amor y que viene siempre en distintas formas.
Frases destacadas:
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<<Caminé en medio de la neblina. Mi corazón latía con fuerza. Algo se aproximaba y tenía mucho miedo. Mi vestido blanco se tiñó de rojo; del cielo caía una lluvia de sangre. Lloré y grité ante la escena tan monstruosa. Corrí hacía la nada. Tenía miedo de encontrar lo que tanto temía. Su voz me llamaba en medio de gritos ahogados.... Era él... mi amigo me necesitaba.>>
—Lo vigilaré desde muy cerca, todavía sigo de pie. Y mientras pueda protegerte lo haré.
—¿Cómo explicarías el amor? —me preguntó Boni al momento que dormía a uno de los pequeños en sus brazos.
Miré hacía la fuente. El sonido del agua correr con poca fuerza, me dio ánimos para responder. —El amor es como el agua —Boni me miró desconcertada. —Es muy fuerte y transparente. Y también creo que significa llorar mucho. Llorar demuestra que todavía tienes alma —le di una sonrisa tímida. —No deberías hacerle esa pregunta a una chica de dieciséis años. Cualquier pensamiento que tengamos respecto al amor, lo basaremos en nuestras nefastas experiencias. Pero si tanto deseas mi respuesta; ahí está. Para mí, el amor es llorar. No sabía lo que era llorar hasta que anhelé, extrañé, cuidé, soñé,... eso es el amor para mí, Boni; aprender a llorar.
—Sabía que detrás de un chico rebelde siempre se escondía un pasado de mierda —le dije conforme le acariciaba el cabello frente a la fuente del orfanato.
—No todos somos una mierda porque nuestro pasado fue una mierda. No le encuentres justificación a mi comportamiento. Soy jodido porque me gusta ser jodido. Punto. ¿Puedes vivir con eso?
Tienes que aprender a ser humilde y aceptar lo que los demás te ofrecen sin exigir nada a cambio.
Loca, es la palabra que encontré más cercana a la cordura, aunque suene contradictorio. Decir que te amo es demasiado simple. Por eso, usar la palabra locura me parece lo más sensato.
Bienvenida a la Asociación Blogger , ya esta incluida en la lista de blogs de la asociación, si quieres unirte en el grupo de facebook aquí tienes el enlace:
ResponderEliminarhttps://www.facebook.com/groups/445114785640224/
se me ha antomado asi que lo voy a apuntar.
ResponderEliminarVengo de la inciativa CDC
Un saludo